El Senado de la República aprobó por unanimidad la reforma constitucional que clasifica el transporte ferroviario de bienes y pasajeros como un área estratégica y prioritaria para el desarrollo nacional.
Al respecto, el senador morenista Óscar Cantón Zetina, presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, indicó:
Que esta reforma se apruebe por unanimidad, como así lo espero lo hará este pleno, simboliza que trasciende colores y gobiernos. Significa que ampliar el uso de las vías férreas al transporte de pasajeros no solo responde a una necesidad de movilidad más eficiente y sostenible, sino que es una política de estado que beneficia a todas y todos los mexicanos
La reforma, propuesta por el expresidente López Obrador en febrero pasado y que modifica el cuarto párrafo y añade un quinto al artículo 28 de la Constitución, establece que el Estado mexicano retoma el derecho de utilizar las vías ferroviarias para prestar el servicio de transporte de pasajeros.
También, faculta al Ejecutivo federal a otorgar asignaciones a empresas públicas o concesiones a particulares.
Los legisladores de Morena y aliados señalaron que el servicio de transporte ferroviario de pasajeros fue descuidado desde la privatización del sector en los años noventa, como lo refirió Luisa Cortés García, senadora de Morena.
De la noche a la mañana, en 1997, llega Ernesto Zedillo y desmantela nuestro país de ese importante medio de comunicación, y se lo entrega a las empresas privadas. Y el pueblo de México dejó de disfrutar esos trenes tan bonitos, tan hermosos
Se busca impulsar el servicio de pasajeros
La reforma busca aprovechar la red ferroviaria existente, que cuenta con más de 27 mil kilómetros de vías, para impulsar el transporte de pasajeros, un servicio que, según el dictamen de la reforma aprobada, actualmente representa menos del 1 % de los desplazamientos a nivel nacional.
Aunque la modificación constitucional fue avalada por todos los partidos, la oposición exigió una planeación adecuada, transparencia presupuestal, estudios de impacto ambiental y un servicio seguro y accesible, como lo indicó Guadalupe Murguía, coordinadora de los senadores del PAN.
Sí, queremos desarrollo; sí, queremos un tren de pasajeros, pero no a cualquier costo. Por eso, demandamos que se realice una adecuada planeación de las obras, que incluya estudios de impacto ambiental que establecen las leyes, que el presupuesto sea transparente y que se dé a conocer el costo de las obras ferroviarias
También, se busca mejorar la conectividad entre regiones, reducir la saturación de carreteras, ofrecer un transporte más eficiente y promover la sustentabilidad ambiental al señalarse que el transporte ferroviario tiene un menor impacto ambiental en comparación con otros medios, contribuyendo así a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y alineándose con los compromisos internacionales del país ante la crisis climática global.
Tras cuatro horas de discusión, la reforma fue aprobada por unanimidad, en lo general y en lo particular, con 123 votos a favor, y fue enviada de inmediato a los congresos estatales. Para que sea promulgada, es necesario que al menos 17 congresos locales la aprueben.
