Un juez federal en materia de amparo concedió una suspensión de plano para que el exprocurador general de la República Jesús Murillo Karam no sea incomunicado y para que se le garantice la salud, la vida y el respeto a sus derechos humanos, además de que deberá contar con medidas sanitarias para evitar que se contagie del virus del COVID-19 mientras esté en el Reclusorio Norte.
Este lunes se informó que el juzgado Segundo de Distrito en Materia de Amparo de la Ciudad de México concedió la suspensión de plano para que el director del Reclusorio Norte le garantice al acusado la salud e integridad física y psicológica.
También pide que, de manera inmediata, se le debe garantizar la salud, por lo que se deberán de tomar todas las prevenciones, acciones y medidas pertinentes para controlar o evitar que se contagie del COVID-19.
En la resolución del juez se aclara que esta suspensión no significa que se le deba de dejar en libertad, pero sí tiene que ser puesto a disposición de la autoridad competente.
El juez de amparo solicita que las autoridades del penal garanticen la dignidad y los derechos humanos del detenido, además se debe permitir el acceso de familiares y abogados al reclusorio para que puedan ingresar y visitar al exprocurador.
También deberán evitar cualquier acto que ponga en peligro la integridad física y emocional del acusado, proporcionándole las condiciones mínimas de dignidad, sanidad, higiene y concederle tratos humanitarios.
El juez establece que el detenido queda bajo la más estricta responsabilidad de las autoridades del Reclusorio Norte, por lo que se deberán tomar las medidas pertinentes para atender la naturaleza y circunstancias del asunto.
El juez fijó un plazo de 24 horas para que las autoridades responsables informen si se está cumpliendo con estos ordenamientos y ordenó que un actuario se presente con el detenido para conocer si confirma la actual demanda de amparo, que promovió en su nombre quien dijo llamarse Rosa Azucena Vargas Hernández.
Con información de Mario Torres, N+
