En punto de las 11:00 horas del pasado martes 20 de febrero, la senadora con licencia y simpatizante del Partido Acción Nacional (PAN), Xóchitl Gálvez Ruiz, acudió a las instalaciones del Instituto Nacional Electoral (INE) en la Ciudad de México con el objetivo de llevar a cabo su registro oficial como candidata a la presidencia de la República por la coalición Fuerza y Corazón por México, por lo que al ser un evento tan trascendente, llamó la atención el momento en que fue captada pegando un chicle debajo de su silla.
La hoy aspirante a suceder a Andrés Manuel López Obrador (AMLO) se volvió tendencia la mañana de este miércoles cuando el material audiovisual se difundió de manera masiva en las plataformas diogitales. Incluso el candidato a la alcaldía Miguel Hidalgo por Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Miguel Torruco Garza fue uno de los que replicó el video, al tiempo que cuestionó si en verdad la presidenciable había pegado la goma de mascar o se trataba de otra cosa.
¿Hay multas por pegar o tirar chicles en la vía pública?
En 2019 la presidenta de la Comisión de Medio Ambiente dentro del Congreso de la Ciudad de México, Teresa Ramos Arreola, quien forma parte de la bancada del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), envió una iniciativa de ley en la cual propuso que todos los ciudadanos que arrojaran chicles en la vía pública, debían pagar una multa por 16 mil pesos debido a que tal acción no solo representaba riesgos sanitarios, sino que además generaban un alto costo para limpiarlos, sobre todo en el primer cuadro de la capital mexicana.
Esta iniciativa, basta hacer mención, proponía que la multa por tirar o pegar chicles en la vía pública fuera de mil 689 pesos y hasta los 16 mil 898 pesos, cantidades que se propusieron al justificar que limpiar sólo los que se encontraban en el piso de las calles de la Ciudad de México, requerían la inversión de hasta 500 mil pesos, además de que al personal de limpia le llevaba por lo menos media hora de trabajo el retirar una sola goma de mascar.
La integrante del Partido Vede expuso al Congreso de la Ciudad de México que el 20 por ciento de la superficie de la urbe contaba con chicles adheridos, sin contabilizar los que se retiraban de mesas o sillas que se localizan en áreas públicas de la capital, situación por la cual se tildó de urgente analizar la iniciativa al considerarse un tópico importante para mantener desde la belleza de la urbe, hasta mantener los espacios limpios permeando la cultura cívica de la población.
Aunque la mayoría de la población se mostró a favor de la iniciativa, ésta no avanzó, lo que dejó sin posibilidad de multar a quienes pegaran chicles en áreas públicas, como se presume lo hizo la aspirante al Poder Ejecutivo.
