Falleció a los 85 años de edad Sergio García Ramírez, Investigador Emérito de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y expresidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, mismo órgano que confirmó la noticia este miércoles 10 de enero.
Carmen Valles, viuda del investigador emérito de la máxima casa de estudios, habría confirmado su muerte al periódico El Universal, al tiempo que la Oficina en México del Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) también publicaba un mensaje de pésame en su cuenta oficial de X.
“Sus valiosas aportaciones perdurarán en el tiempo. Nuestras condolencias a su familia y amistades”, se lee en la publicación del organismo.
Hasta el momento se desconoce las causas del deceso del también exconsejero del desaparecido Instituto Federal Electoral, sin embargo, el ámbito académico y jurídico, han utilizado las redes sociales para lamentar la noticia y enviar condolencias a la familia.
¿Quién era Sergio García Ramírez?
Es autor de más de cincuenta libros y numerosos artículos de revista, de investigación, docencia y divulgación, publicados en México y en el extranjero. La mayoría de sus publicaciones abordan temas jurídicos y criminológicos. Nació en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, el 1 de febrero de 1938.
Cuenta también con trabajos de otras materias: política y literatura, principalmente. Fue Juez y Presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, así como Consejero Electoral en el Instituto Federal Electoral.
Perteneció a diversas corporaciones académicas y profesionales, entre ellas la Academia Mexicana de Ciencias Penales (de la que es Presidente), la Academia Mexicana de Legislación y Jurisprudencia, correspondiente de la Española, el Instituto Mexicano de Derecho Procesal, el Instituto Iberoamericano de Derecho Procesal.
“Abrazos, no balazos”, una estrategia que fue criticada por el jurista García Ramírez
Sergio García Ramírez, en una entrevista que ofreció para El Financiero, criticó la estrategia de seguridad del presidente Andrés Manuel López Obrador, y que se ha resumido en una popular frase: “Abrazos, no balazos”. Él consideraba que la Fiscalía General de la República (FGR) carecía de autonomía debido a que durante su funcionamiento intervienen militares, marinos y hasta Guardias Nacionales.
Calificaba la estrategia de la actual administración “un discurso romántico que no ha dado resultados”, ya que para el investigador la cifra de muertos estaba desbocada. Explicaba que en la actualidad hay una crítica “feroz” al sistema judicial cuando no atiende los deseos del Ejecutivo. “Críticas que debilitan al Poder Judicial”, agregó. También denunciaba la falta de una policía civil, y la que se encuentra en las calles es insuficiente.