Una historia de película ocurrió en California, Estados Unidos; una mujer fue acusada y detenida luego de contratar un sicario para asesinar a su marido por dos millones de dólares mientras se encontraban en el proceso de divorcio.
La mujer comenzó a ser sospechosa de planear el asesinato de su marido luego de que intentara incinerar una mansión valuada en 5 millones de dólares en un barrio exclusivo de San Diego.
La historia de esta mujer comenzó el pasado 2 de julio, cuando luego de prender fuego a la mansión descubrieron que tenía tres armas y municiones. Tatyana Remley fue detenida de manera temporal, pero quedó en libertad tras no encontrarse antecedentes.
Días después, el 11 de julio, la mujer le solicitó el divorcio a su esposo en los juzgados de California y la Policía encendió nuevamente las alertas tras un rumor de que esta mujer buscaba a un sicario.
Casi de inmediato, las autoridades infiltraron a un policía como sicario y el 2 de agosto la mujer tuvo contacto con el supuesto asesino en una cafetería. Allí, sin saberlo, dio información vital a las autoridades.
“Ella proporcionó información detallada sobre cómo quería que mataran a su marido y se deshicieran de su cuerpo. Remley trajo tres armas de fuego adicionales y dinero para el pago inicial por el asesinato”, dijo la policía en un comunicado de prensa.
Según los documentos obtenidos por ‘CBS 8’, Tatyana y su esposo, identificado como Mark, se encontraban juntos desde marzo de 2011.
Antes del divorcio, la mujer le solicitó a su esposo 15 mil dólares al mes en manutención conyugal. También se dio a conocer que la pareja tenía varias mansiones lujosas en los Estados Unidos y una colección de autos avaluada en 1 millón de dólares.
Gastaban más de 50 mil dólares al mes y tenían guardaespaldas, asistentes personales y choferes y solían irse de viaje en cruceros de lujo.
“Algunas noches, las partes gastaban 30 mil dólares en una sola noche”, indican documentos judiciales. En otros documentos se registra que la mujer logró denunciar a su pareja por violencia en dos ocasiones, pues este le habría puesto una pistola en la cabeza y la persiguió con un cuchillo. También lo acusa por haber estado presente cuando un amigo de él abusó de ella y no hizo nada.
Un día antes de que se revelara que Tatyana había intentado contratar un sicario para matarlo, Mark fue trasladado al hospital. El hombre tocó a la casa de un vecino, diciendo que creía estar sufriendo un ataque al corazón.
La mujer quedó detenida y acusada por intento de asesinato.