Ni nosotros veíamos venir este momento en el fan event de Barbie: Margot Robbie, Ryan Gosling y América Ferrera cantando el “Cielito Lindo” gracias a que un mariachi de mujeres les llevó una romántica serenata sobre el escenario de Parque Toreo. Todo el folclor mexicano en una noche. ¡Ahora sí no pueden negar que estuvieron en México! Acá les contamos a todos ustedes cómo se vivió este sorpresivo momento antes de retirarse del escenario y la plaza abarrotado por fans ansiosos por ver la cinta de Greta Gerwig.
Después de tener su entrevista breve con los conductores del encarpetado, los tres se retiraron a seguir firmando todos los artículos que tenían en las manos sus fans y cumplirles el sueño a todos los que arribaron desde las 6 de la mañana y llegaron al grado de mentir en sus trabajos con tal de estar en la noche más rosa del año. Cuando todo parecía terminar, los tres volvieron al centro para despedirse de sus seguidores. El esposo de Eva Mendes una vez más fue breve y dijo en español “Te amo, México”.
Entonces un grupo de mariachis vestido con atuendos rosas entraron con todo su arsenal de cuerdas, viento y ejecutaron “El son de la negra”. Lo más chistoso fue ver los rostros desencajados de la protagonista de El Escuadrón Suicida y La La Land, porque, seamos honestos, no están acostumbrados a todo este despliegue tradicional y quizá tampoco dimensionen la importancia de un mariachi para la cultura popular mexicana.
Cosa que sí sucedió con Ferrera. ¿Vieron que era la única que estuvo cantando el “Cielito Lindo”? Pues claro, es una de las canciones más emblemáticas y viviendo en Los Ángeles seguramente conoce mucho de esta tradición. Hubo un momento donde Margot la miró con detenimiento y curiosidad. Sabía que lo estaba disfrutando. También pensamos que en un momento la también actriz en Babylon iba a bailar, pero no sucedió.
Estuvieron unos cinco minutos recibiendo su serenata y esperando a saber cómo reaccionar. La primera en bajar fue Ferrera, después la dupla protagónica se quedó un poco más en la tarima de forma respetuosa escuchando un son huasteco y procedieron a agradecer el generoso acto que las músicas les llevaron. “Gracias”, se alcanzó a leer en los labios de Gosling y visiblemente incómodo por abandonar el mini concierto en plena ejecución. Pero este es uno de los momentos México mágico que nunca olvidarán.
