Estudios recientes han señalado que el huevo es un superalimento, aunque hace algunos años, se le hizo mala fama, al asociarlo con el aumento del colesterol, aunque afortunadamente se comprobó que esto es falso.
Los expertos afirman que consumir huevo no aporta carbohidratos, ni gluten, ni lactosa, lo que lo convierte en un alimento “comodín” para diabéticos, celíacos y alérgicos a la lactosa.
Asimismo, aporta aproximadamente 75 calorías, equivalente a una fruta mediana, y si a diario te comes 2 huevos, se cubre más del 15% de vitamina A, E, B2, niacina, hierro, zinc y selenio, y más del 30% de la vitamina B12, ácido pantoténico, biotina, colina y fósforo en adultos entre 20 y 49 años.
Ya que sabemos que el huevo es un excelente alimento, cabe la pregunta: ¿es mejor el huevo rojo o el blanco?
Al respecto, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), aseguró que el color del huevo, rojo o blanco, no tienen nada que ver con su valor nutrimental, ya que el color del cascarón, sólo indica la raza de la gallina que lo puso, y la creencia de que el huevo rojo es mejor que el huevo blanco, es solo eso, una creencia.
Finalmente, otro punto a favor del huevo, es el cuidado del medio ambiente, ya que los huevos son una fuente de nutrición sostenible por ser proteínas de bajo impacto, es decir, que tienen una huella de carbono más baja en comparación con otras proteínas de origen animal y comparables con algunas de origen vegetal; por lo que Por lo que requiere poco uso de agua; más o menos la huella de un huevo es de 29 litros por gramo de proteína, en comparación, a las nueces (proteína de origen vegetal), que tienen una huella de 139 litros por gramo.
Con información de Profeco, Infobae y Redes sociales
